Conocí a Blu cuando tenía sobre 30 días, por lo que aún tomaba papilla. Es cierto que un pollo papillero tendrá otro carácter que uno que no lo sea, pero este tipo de alimentación tiene sus riesgos y no es del todo apta para principiantes.
Los pollos suelen sacarse del nido a los 25 días y el patrón de comidas será este (a consultar con un veterinario):
- Diez primeros días; tomas cada 4h. 5mL de papilla.
- Día 11 al 20; tomas cada 6h. 8-9mL de papilla.
- Empieza el destete.
El destete
Consiste en dejar agua limpia y mijo en rama en la jaula o en la caja, entre las tomas de papilla, por lo que el pollo irá probando lo que es comer solo. Iremos observando la cantidad de mijo que come solo y reduciendo, de forma gradual, la toma de papilla. Es posible que tarde tiempo en comer solo, de hecho, Blu estuvo con papilla hasta el día 60 pero llegó un momento en el que no quiso volver a probarla.
Cómo preparar la papilla
Hay muchas marcas, la que comió Blu era de la marca Kaytee. Prepara una papilla es muy fácil:
- Cogemos un vaso de 250mL y lo llenamos un poco más de un cuarto. Lo calentamos en el microondas 1 minuto y medio a baja potencia.
- Con una cuchara de postre, echamos los polvos de la papilla dentro y lo mezclamos bien. Hasta conseguir una papilla uniforme más espesa que líquida.
- Utilizando una jeringa de 10mL, podemos coger la cantidad exacta de papilla.
Antes de darle la papilla al pollo, debemos comprobar que no está muy caliente ya que el buche (es una dilatación del esófago) es muy sensible y podemos quemarle, provocando una grave herida. Más o menos debe estar un poco más caliente que la temperatura ambiente, como la leche que le damos a los bebés.
Y precisamente es el buche en lo que debemos fijarnos cuando no sabemos si el pollo tiene hambre o no. El buche se sitúa al final del cuello, casi entrando en el cuerpo (dónde la marca en la foto), y se nota fácilmente al tacto si está lleno, que es como debe estar al terminar la toma.
Por último…
Son un poco guarretes y se manchan muchísimo durante las tomas, por lo que es muy importante limpiarles bien para evitar que se acumule suciedad.
Debemos tener en cuenta, cuando acabamos la toma, que la papilla que nos ha sobrado no podemos guardarla bajo ningún concepto porque es un lugar ideal para que crezcan bacterias y hongos. Por la misma razón, hay que lavar en profundidad la jeringa y el vaso, después de cada toma.
Yo, por deformación profesional, cada día a la misma hora (siempre antes de la toma) pesaba a Blu para llevar un control. Así puedes ver si algo no va bien y ponerle remedio lo antes posible. El peso, dependerá de la edad y de la especie de ave.
Estas son algunas recomendaciones basadas en mi experiencia, si tienes cualquier duda acude a un profesional, un veterinario de exóticos sabrá dirigirte de la mejor forma en esta experiencia.
Cuatro Huellas 